Puedes definir la hipoacusia como la perdida de audición parcial o total, en uno o ambos oídos. En ocasiones se acompaña de otras manifestaciones tales como zumbidos y sensación de presión dentro de los oídos o pérdida del equilibrio. En caso de sufrir de estos síntomas tienes el recurso de compensar la pérdida auditiva con el adecuado uso de audifonos.
Definición de hipoacusia y sus causas
Con más precisión, hablaremos de hipoacusia cuando la pérdida auditiva sea mayor a 30 decibelios en niños, y mayor a 40 decibelios en adultos. Sus causas son múltiples.
Causas congénitas
– Infecciones maternas durante el embarazo, como sífilis o rubéola.
– Ictericia en el recién nacido (coloración amarilla por acumulación de bilirrubina) que afecta el nervio auditivo.
– Uso de medicamentos durante el embarazo, tales como diuréticos, antipalúdicos y antibióticos.
– Parto prematuro o bajo peso al nacer.
– Falta de oxígeno durante el parto.
Causas adquiridas
– Afecciones crónicas del oído.
– Infecciones como meningitis, parotiditis y sarampión.
– Traumatismos del cráneo o de los oídos.
– Ruido ambiental excesivo por períodos prolongados, tanto en los ambientes laborales como en los recreativos (bares, discotecas).
– Uso de medicamentos para combatir el paludismo, el cáncer o la tuberculosis.
– Edad avanzada.
– Obstrucción del conducto auditivo por cuerpos extraños o cerumen.
Hipoacusia Causas: ¿Cómo prevenir la pérdida de audición?
La mayoría de las causas de hipoacusia son prevenibles. Aquí te dejamos una serie de consejos generales que pueden ayudar a prevenir la perdida auditiva.
– Se debe vacunar a los niños contra sarampión, meningitis, parotiditis y rubéola. Así mismo, también se debe vacunar contra la rubéola a las adolescentes y mujeres en edad fértil.
– Establecer medidas para la detección de la sífilis en embarazadas.
– Atención y seguimiento a los casos de otitis media.
– Restringir el uso de medicamentos nocivos para la audición a los estrictamente prescritos y supervisados por el médico.
– Pedir cita en centros de salud especializados a los bebés que presenten factores de riesgo. Ello con el fin de realizar evaluaciones preventivas para detectar precozmente la posible pérdida auditiva y tomar los correctivos necesarios.
– Controlar los niveles de ruido en ambientes laborales y recreativos. Uso de equipos de protección personal que protejan eficientemente del ruido en caso de exposición laboral.
– No someter a las embarazadas a ambientes ruidosos.
– Evaluación periódica en centros de salud especializados en la audición. Recuerda que la perdida de audición se da en todas las edades.
– Evitar escuchar la música a niveles muy altos
El uso de audifonos
Los audifonos constituyen una herramienta muy útil para mitigar los efectos de la perdida de audición. El ruido y la distancia desde la fuente de emisión del sonido hasta el receptor son factores que contribuyen a la percepción escasa de los sonidos, y que se añaden a la pérdida auditiva dificultando su inteligibilidad Los dispositivos de ayuda auditiva tienen como función amplificar los sonidos deseados y minimizar los ruidos indeseados (ruidos de trasfondo, distorsiones causadas por la distancia, ecos).
La selección adecuada de los audifonos en sus diferentes tipos dependerá: del nivel de pérdida auditiva, de tu destreza manual del usuario, de tus preferencias personales, de las dimensiones de tu pabellón auricular y de las nuevas tecnologías disponibles.
La hipoacusia que no es atendida puede causar atraso del desarrollo del habla y del aprendizaje en los niños. En los adultos genera aislamiento social y soledad.